El grupo español de apuestas Codere SA ha acordado los términos de una nueva ‘propuesta de refinanciación’ con los actuales titulares de los bonos, que permitirá a la empresa acceder a una nueva extensión de crédito de 250 millones de euros.
Tras semanas de negociaciones, Codere ha asegurado la vital financiación de liquidez para mantener a flote sus unidades de negocio españolas y sudamericanas.
Los tenedores de bonos estadounidenses Jupiter AM, Dryden Capital, Invesco y Blackrock han concedido la extensión del crédito, garantizado en términos de interés del 12,75% – el doble de la tasa que la empresa paga actualmente por los 800 millones de euros de interés anual de su deuda a largo plazo.
La transacción ha sido aprobada por los propietarios mayoritarios de la deuda de Codere, los fondos de capital privado estadounidenses Silver Point y Abrams Capital.
Durante el cierre, Codere reveló que tenía una posición de efectivo de 83 millones de euros. Pero que, según se informa, está quemando 25 millones de euros al mes manteniendo sus operaciones diarias.
Al borde de la quiebra
Codere empleó a Bank of America para renegociar las condiciones de la deuda con los inversores estadounidenses que buscaban asegurar una línea de vida adicional de 100 millones de euros. Un alegato rechazado por Silver Point y Abrams Capital.
Al cierre de las operaciones de junio, fuentes de noticias empresariales españolas informaron que Codere había sido salvada por el fondo de cobertura de Miami Dryden Capital. Que había garantizado a la empresa el acceso a una línea de crédito de 120-150 millones de euros en un acuerdo de 12 meses.
La dirección de Codere decidió no revelar el nombre de su nuevo inversor. Pero declaró que había entrado en negociaciones cruciales en julio con una garantía de financiación.
El anuncio de la semana verá a Codere ampliar su línea de crédito a corto plazo hasta los 250 millones de euros. Respaldada por fondos estadounidenses que invierten en las asediadas empresas españolas que salen de la pandemia.